Los personajes referidos a la saga Crepúsculo que son usados en este blog son propiedad de Stephenie Meyer.

diciembre 18, 2011

Cap. VI

Ella es capaz de soportar más que una pelea entre chicos hormonales

— ¿Qué pasó? —exclamo Bella alterada— ¿Es que se han enfrentado? —a medida de que hablaba su voz aumentaba de tono—. ¿Por qué? ¿Está herido Paul?

—No hubo lucha —le dijo el chupasangre de lo más tranquilo, narrando los hechos solo por encima; sin explayarse en nada, era obvio que no le había contado nada de lo ocurrido—. Nadie salió herido. No te inquietes.

—No le has contado nada en absoluto, ¿a qué no? ¿Ese es el modo en que la mantienes apartada? Por eso ella no sabe...

—Vete, ya —me corto a mitad de frase… pensaba decirle “Por eso ella no sabe que la chupasangre anda cerca, que vino tras ella mientras él se la había llevado lejos.

El vampiro escuchaba mis pensamientos mientras me fulminaba con la mirada.

Enarque las cejas esperando a que respondiera lo que mi cabeza gritaba…

— ¿Por qué no se lo has dicho? —pregunte en voz alta esta vez.

Nos miramos con desprecio…

Eres un cobarde… —le dije en mi mente—crees que esconderle el peligro en el que esta va a arreglar las cosas, igual la vampira pelirroja esta tras ella, y NO PUEDES EVITARLO…!!!
Mientras era consciente de nuestros admiradores, no pude darme cuenta de Bella, y de sus cavilaciones, cuando recordé que estaba cerca de mí, pude escuchar el golpeteo frenético de su corazón, había llegado a una conclusión.

—Ella ha vuelto a por mí —susurro con la voz queda.

El chupasangre la abrazo cuando por sus ojos rodaban lagrimas.

—No pasa nada —aclamo el vampiro con la voz estrangulada mientras la abrazaba de forma ansiosa—. No pasa nada. Nunca dejaré que se te acerque, no pasa nada.

El aludido voltio a verme con odio.

— ¿Contesta esto a tu pregunta, chucho?

— ¿No crees que Bella tiene derecho a saberlo? —le replique, reclamándole que se tomara el derecho de ocultárselo—. Es su vida.

— ¿Por qué debe tener miedo si nunca ha estado en peligro? –susurro a causa del público.

—Mejor asustada que ignorante –escupí.

Mientras yo más me molestaba el más trataba de consolarle ignorando el hecho de que era un mentiroso, ocultar también es engaño.

— ¿Realmente crees que herirla es mejor que protegerla? —murmuró el mientras secaba sus lagrimas.

—Ella es más fuerte de lo que crees —le recordé mientras mi mente revolvía viejos recuerdos—. Y lo ha pasado bastante peor –dije recordando.

Una idea llego a mi mente en eso momento, una imagen que Sam había pasado a mi mente, cuando encontró a Bella, en el suelo, llorando en medio del bosque, sola, una imagen que siempre me ha lastimado. Aunque yo no era ni por asomo el culpable de ese instante; el verdadero culpable estaba frente a mí, entonces porque no mostrarle a él lo que había dejado luego de su partida.

Deje que esa imagen fluyera en mi mente, explayándome en cada detalle, en sus sollozos y los cambios que sufrió al pasar de los días, como se mantuvo apagada, triste y desolada, un cuerpo sin alma. Cada momento lo deje fluis, que viera como había dejado a Bella, el había sido el culpable de que ella quedara como un cascarón vacío y debía ver eso por si mismo, aunque no fuera en vivo.

—Qué divertido —exclame con una carcajada sorbía y regocijadora, podía parecer un monstruo, pero él lo era peor. Por el ella se había quedado así.

— ¿Qué le estás haciendo? —quiso saber Bella cuando el gesto de dolor y fatiga que reflejaba el vampiro iba más allá de lo normal.

— No es nada, Bella —dijo el interpelado con la voz algo arrastrada—. Sólo que Jacob tiene muy buena memoria, eso es todo.

Esboce otra sonrisa cuando una vez más deje fluis la imagen de Bella tirada en el bosque llorando.

— ¡Para ya! Sea lo que sea que estés haciendo.

— Vale, si tú quieres —exclame con un perfecto encogimiento de hombros—. Aunque es culpa suya si no le gustan mis recuerdos.
Me miro molesta y yo sonreí con maldad. No lo hacía para lastimarla a ella, si no a él, tenía que ver todo lo malo que había dejado atrás y que se diera cuenta de sus errores.

—El director viene de camino a echar a los merodeadores de la propiedad del
Instituto —susurro el vampiro aun con la voz lastimada—. Vete a clase de Lengua, Bella, no quiero que te veas implicada.

—Es un poco sobreprotector, ¿a que sí? —pregunte con voz sarcástica mirando solo a Bella—.Algo de agitación hace que la vida sea divertida—dije con voz melosa y calculadora— Déjame adivinar, ¿a que no tienes permiso para divertirte?

El vampiro me fulmino con la mirada, molesto por el rumbo que tomaban mis pensamientos.
—Cierra el pico, Jacob —exclamo Bella.
No pude evitar reírme, era más que obvia la respuesta. El la tenía encerrada en una caja de acero.

—Eso suena a negativa. Oye, si alguna vez quieres volver a vivir la vida, ven a
Verme. Todavía tengo tu moto en mi garaje.

—Se supone que deberías haberla vendido. Le prometiste a Charlie que lo harías.

—Ah, sí, claro. Como si yo pudiera hacer eso. Es tuya, no mía. De cualquier modo, la conservaré hasta que quieras que te la devuelva.
Dije con voz tranquila, con una leve esperanza de que ella volviera a por ella. Extrañaba de sobre manera andar en moto con ella, y ser como antes solo un par de chiquillos locos y despreocupados que andaban en moto sin hacer caso a los peligros.
Una estúpida sonrisa cruzo mi rostro cuando estos recuerdos atravesaban mi mente fugazmente.

—Jake...

No pude evitar reaccionar ante mi nombre, la extrañaba.

— Creo que lo he estado haciendo mal hasta ahora, ya sabes, acerca de no volver a vernos como amigos. —Exclame consciente de su estúpido acompañante— Quizá podríamos apañarnos, al menos por mi parte. —dije esperanzado tratando de ponerle posibles alternativas, que ella eligiera alguna y reanudara lo poco que quedaba de nuestra amistad. — Ven a visitarme algún día.

—Esto, yo... no sé, Jake.

Sus dudas y su flaqueza me dieron las mismas estúpidas esperanzas de siempre, toda careta de desprecio y burla cayeron.

—Te echo de menos todos los días, Bella. Las cosas no son lo mismo sin ti.

—Ya lo sé y lo siento, Jake, yo sólo...

Claro yo siempre de idiota dejándole en claro que la extrañaba, sin importaba que el chupasangre estuviera junto a ella, escuchando todos mis pensamientos y viendo como me desmayaba de amor frente a ella.
Tome la máscara y me la puse de nuevo.

—Lo sé. Después de todo, no importa, ¿verdad? Supongo que sobreviviré o lo que sea. ¿A quién le hacen falta amigos? —escupí molesto y frenéticamente exasperado.

—Venga, a clase —escuche esta voz gruesa a mis espaldas—. Póngase en marcha, señor Crowley.

—Vete al colegio, Jake —exclamo en voz baja Bella.

— ¡He dicho que ya! —amenazó—. Castigaré a todo el que me encuentre aquí mirando cuando me dé la vuelta.
—Ah, señor Cullen. ¿Qué ocurre aquí? ¿Algún problema?

— Ninguno, señor Greene. Íbamos ya de camino a clase.

—Excelente. Creo que no conozco a su amigo —exclamo mientras me veía con una mirada calculadora pero asustado internamente—. ¿Es usted un estudiante del centro?

—No —exclame con voz sarcástica y burlona. El hecho de que me tuvieran miedo me agradaba más que ser afable.

—Entonces le sugiero que se marche de la propiedad de la escuela rápido, jovencito, antes de que llame a la policía.

Si casi podía imaginarme a Charlie arrestándome, me reí de buen gana mientras de forma burlona imitaba a un milita y decía «Sí, señor», con una gran sonrisa de descaro y burla…

Subí a mi moto sin volver la vista atrás, pise el pedal con fuerza una sola vez y este arranco, le di toda la velocidad y desaparecí tan rápido que solo deje polvo y recuerdos tras de mí.




2 comentarios:

  1. amiggaaaaaa noooooo porqee así??
    tzz...ahora a esperaaar haha
    me mordere las uñaaaas y tu tendraas qe
    pagarme mi manikiiiiuuuurrrr jjajjajjajja NTC
    amigaa ttee qierO un chhurrumaaaiz

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  2. Angela, Que bien esplicado esta el capitulo . El dolor de Edward cuando ve las imagenes que Jacob le manda con su mente. Tambien Jacob sufre con esas imagenes al recordar lo que paso para ayudar a Bella a salir de la oscuridad, la desesperacion y despues del letargo, sin interes en vivir.

    Besos y abrazos

    LISY

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