Los personajes referidos a la saga Crepúsculo que son usados en este blog son propiedad de Stephenie Meyer.

mayo 15, 2011

Cap. VI

Cosas por hacer.

—Hola, papá —dijimos al unisonó. Rompimos a reír de nuevo, como un par de chiquillos que bromean de forma incesante sin importar la magnitud o lo insignificante que pueda ser el chiste.

Aun mantenía a Bella tomada de la mano, y Charlie lo noto por supuesto. Su mirada estaba clavada en Bella, especialmente en la mano que mantenía entre a la mía.

—Billy nos ha invitado a cenar —dijo Charlie con la vista fija en Bella. Hablo en un susurro.
—Mi receta ultra secreta para los espaguetis con carne, transmitida de generación en generación —dijo Billy en tono solemne.

Bufe de forma divertida y burlona.

—La verdad, dudo que esa receta exista desde hace tanto. —bromee.

Papá había invitado también a comer a los Clearwater, Harry, Sue, Leah y Seth. Apenas entramos a la casa todo parecía encogerse por la cantidad de gente, pero de una u otra forma parecía una familia reunida. Leah pasó toda la noche pegada al teléfono. Al parecer Sam había salido temprano, y no sabían nada de el aun. Ella estaba mas que preocupada por Sam.

Me acerque a Seth y lo salude con ligero abrazo, el es un pequeño apenas de tan solo catorce años, aunque no lo aparenta tanto al hablar. Era joven si, pero de mucha confianza y un gran amigo. Pasaba la mayor parte del tiempo cerca de mi, o hablando conmigo.

Intentamos sin éxito comer juntos en la mesa, pero jamás podríamos sentarnos todos en esa mesa tan pequeña. Así que Charlie fue con Harry salieron al patio en busca de otras sillas. Nos comimos la cena con los platos sobre nuestras piernas. No me incomodaba en absoluto pero me sentía algo mal por Bella, aunque ella se veía de lo mejor, no dejaba de sonreír y miraba a todos con un brillo muy ligero en los ojos.

Esta Bella que estaba a mi lado, parecía una diferente a la de hace unos días.

Me hacia feliz tener que ver en eso.

Harry, Charlie y papá veían el juego en la sala de estar, y hacían planes para ir de pesca, mientras Sue trataba de convencer a Harry de que desistiera, por el colesterol e intento hacerlo comer algo de un feo color verde. Pero Harry era muy terco, solo se reía y continuaba comiéndose sus espaguetis con carne, que además estaban muy sabrosos.

Pase toda la noche hablando con Bella, de diferentes cosas que salían la paso de nuestra conversación, Seth me interrumpía debes en cuando yo me olvidaba de su presencia y me sumía en una conversación donde no lo incluía a el.

Todos hablaban más que un radio prestado. En voz alta y narrando diferentes anécdotas y chistes. Bella se reía de forma cómoda en la charla.

Luego de unos minutos el cielo fue cubierto por una espesa nube, trayendo consigo una lluvia típica del estado, dando por terminada la pequeña fiesta. Cuando Charlie se iba con Bella, me apresure a su lado para despedirme de ella. Le di un corto abrazo y retrocedí. Charlie se despidió con la mano desde el auto. Harry se había ido un poco antes con Sue y sus hijos. Leah continuaba dando vueltas como una leona, apresurada por irse.

Papá estaba sonriente, más que satisfecho por como se estaba dando mi amistad con Bella. Yo no podía evitar sentirme feliz por ese hecho, también a mi me alegraba. Quería pasar cada minuto del día con ella.
Estuve un rato en el garaje durante esa noche reparando la moto roja. Era de Bella, y quería que quedara perfecta. Pasaron un par de horas, ajuste las tuercas del manubrio cromado para la moto, revise el arranque y los cables del freno. Todo estaba mejorando y la moto se veía cada vez mejor.

El largo día comenzó a pesarme sobre los hombros. Me bañe y me acosté a dormir mas que relajado. Deseoso de que la mañana me trajera a Bella nuevamente.

Me levante temprano y puse manos a la obra con la moto, me sentía eufórico, había dormido mas que bien, como un león que descansa sobre el pasto, bajo la sombra de un baobad.

Le coloque los neumáticos nuevamente, estaban en un estado aceptable. Modifique las suspensiones y puse la moto en pie.

Cuando vi el reloj me levante como un resorte del suelo. Sali corriendo a bañarme a vestirme. Comí algo improvisado, creo que era un pan con jamón, o algo así.

Llegue al instituto casi sin aliento por que había corrido desde el estacionamiento. Llegue algo tarde a la clase de historia y además había olvidado por completo un trabajo que nos habían asignado la semana pasada.

Estaba algo retrasado con mis estudios, debía rogar ahora para que papá no se enterara y ver como recuperaba esa nota.

Pase el resto de la mañana perdido entre mis pensamientos y el techo del aula. Los muchachos ya comenzaban a preocuparse.

— Cielos jake, pareces un loco. Tas frito. —se había burlado Embry.

Llegue a casa aun pensativo. Necesitaba ponerme al día con mis estudios y terminar la moto.
Aunque si fuera mas inteligente y no tan fanfarrón fuera tardado más. Sol quería mostrar mi habilidad y rapidez, pero se me olvido el hecho de que al terminar las motos, Bella se iría. Dejaría de visitarme tan seguido como lo hace ahora.

Agarre una bolsa de papás y varias sodas. Me fui al garaje y las metí dentro del pequeño refrigerador mientras me devoraba las papas. Un sonido ya más que conocido, recorría el camino hasta el frente de mi casa, por algún motivo mi sentido del oído está más agudo que hace unos días.

2 comentarios:

  1. hola nena lindo cap... jake ayuda a bella a sonreir un rato!!! y ya pronto me tocara leer la parte de las motos... prometo en la semana dejar de nuevo mis comen pasados un beso!!!

    ResponderEliminar
  2. Que tiernos esos papas alcahuetes ellos hubieran querido que asi se quedaran las cosas. Y Jake que se recriminaba por haber arreglado pronto las motos, pobresito.

    Exelente capitulo Angela!

    Besos y abrazos,

    LISY

    ResponderEliminar